Se trata de una consecuencia directa del cambio climático y los gases de efecto invernadero, que favorecen el desarrollo de este tipo de plantas en un ambiente nocivo. Si a esto le sumamos la contaminación y la calima, es lógico que las alergias sean más frecuentes e incluso más agresivas, sobre todo en las grandes urbes y ciudades.
No se puede vincular a un factor en exclusiva los cambios de concentración en el aire del polen. Aunque la intrusión repentina de la calima, el polvo y la arena en suspensión y las lluvias de barro en España, han hecho de nuestro país uno de los más contaminados en lo que a la calidad del aire se refiere, al nivel incluso de China.
La calima provoca problemas respiratorios e irritación de las mucosas, tos, picor ocular y de garganta, congestión nasal y asma.
La alergia normalmente viene acompañada de todos los síntomas anteriores producidos por la calima, y además, de goteo nasal, estornudos, taponamientos, picor de oídos y paladar, sibilancias y ahogos.
Ante cualquier sospecha de alergia, acude a tu médico para diagnosticar la causa de la sensibilidad a través de una prueba alérgica.
Para aliviarlos síntomas de la alergia sigue estos 9 consejos:
