Mezcla de sales y xilitol que han sido especialmente formulados para preparar una solución salina destinada para la realización de irrigación nasal.
Contiene xilitol que tiene un efecto humectante, para favorecer la hidratación de la mucosa, y propiedades antiadherentes, así como la capacidad de inhibición del crecimiento de patógenos.
No tiene conservantes añadidos que puedan dañar la sensible mucosa nasal.
El estuche equivale a 40 lavados nasales.
La irrigación nasal con este producto está indicada para: Obstrucción nasal por exceso de moco. Catarros. Rinitis infecciosas causadas por virus y bacterias. Rinitis / Rinosinusitis aguda y crónica (alérgica, atrófica o del embarazo). Cuidado tras cirugía endonasal. Ronquidos por obstrucción nasal debido a la acumulación de secreciones. Limpieza nasal previa a la administración de medicación intranasal. Higiene de las fosas nasales.
Cloruro sódico, bicarbonato sódico, cloruro potásico, xilitol, cloruro cálcico.
- Caducidad de los sobres: 5 años desde su fabricación. La fecha de caducidad figura en cada sobre y en el envase externo de Rhinodouche® Sal.
- Para su almacenamiento, evitar temperaturas superiores a 35°C.
1. Añadir el contenido de un sobre en el dispositivo.
2. Llenar la botella con 500 mL de agua* limpia y tibia y enroscar el tapón-adaptador nasal, asegurando un cierre hermético.
* Agua potable procedente de una red de abastecimiento que garantice la ausencia de microorganismos patógenos, agua hervida o estéril
3. Inclinar la cabeza sobre el lavabo e introducir el adaptador nasal en un orificio de la nariz. Hacer presión sobre la botella de forma suave pero constante, respirar por la boca. Repetir los pasos en el otro orificio nasal hasta agotar la solución.
Recomendado a partir de 14 años (para edades inferiores, se recomienda Rhinodouche Junior)
La preparación de la solución de irrigación con Rhinodouche Sal debe realizarse inmediatamente previo al uso, ya que no contiene conservantes.
Se debe emplear agua potable procedente de una red de abastecimiento que garantice la ausencia de microorganismos patógenos, agua hervida o estéril. El uso de agua hervida o estéril puede ser recomendable en determinadas patologías (p.ej., fibrosis quística) o tras cirugía nasal.
Presionar la botella de forma suave. Presiones altas pueden hacer daño.
No forzar la irrigación si la nariz está totalmente obstruida.
Evitar su ingestión.
En caso de patología ótica, consultar a su médico.
No hay ninguna contraindicación en su uso durante el embarazo y lactancia.